El desperdicio de alimentos es un problema que en la actualidad está presente en todo el mundo, perjudicando la economía global y afectando los recursos naturales. Descubre las consecuencias de esta terrible acción y cómo puedes contribuir a la disminución de este despilfarro de comida.
El desperdicio de alimentos es una preocupación en constante expansión a lo largo del planeta. Cada año, se desperdician aproximadamente 1.3 mil millones de toneladas de alimentos, siendo equivalente a un tercio de la producción total de los mismos.
Este despilfarro no tiene únicamente un impacto negativo en la disponibilidad de alimentos para muchas personas, sino que también agota una gran cantidad de recursos naturales y contribuye al cambio climático. Por este motivo, es importante tomar acciones para cuidar el medio ambiente, evitando desperdiciar alimentos en buen estado.
Consumo excesivo de recursos naturales
El desperdicio de alimentos tiene un impacto bastante grave en los diversos recursos naturales. La producción de alimentos necesita de enormes cantidades de agua, tierra y energía para llevarse a cabo. Por ejemplo, se estima que se utilizan aproximadamente 3.800 litros de agua para producir un kilogramo de arroz, y al menos 15.000 litros para un kilogramo de carne. Por lo tanto, cuando se desperdician alimentos, también se contribuye al desperdicio de recursos de gran valor.
Asimismo, el desperdicio de alimentos también agota la tierra cultivable. Es necesario contar con amplias extensiones de tierra para cultivar alimentos que al final no serán consumidos, lo que lleva a la deforestación y a la pérdida de biodiversidad. Por otro lado, la producción de alimentos utiliza grandes cantidades de energía, tanto en el proceso de cultivo como en el transporte y almacenamiento de los alimentos.
Contribuye al cambio climático
El cambio climático tiene entre sus causas el desperdicio de alimentos
. Y es que cuando los alimentos se descomponen en vertederos propician la liberación de metano, un gas de efecto invernadero que resulta mucho más potente que el dióxido de carbono. Este gas tiene la capacidad de propiciar el calentamiento global 25 veces más en 100 años que el dióxido de carbono.
Además, la misma producción de alimentos también puede generar emisiones de gases de efecto invernadero a partir del uso intensivo de maquinarias de agricultura, el transporte o el almacenamiento de los alimentos. Esto quiere decir que las fases que comprenden la producción y la distribución de los alimentos conducen a una mayor emisión de gases de efecto invernadero.
Cómo reducir el desperdicio de alimentos
Tomar las medidas necesarias para evitar el desperdicio de alimentos y reducir su impacto negativo en el ambiente resulta fundamental para cuidar el futuro del planeta. Algunos consejos que puedes aplicar para esto son los siguientes:
- Haz un plan alimenticio: antes de hacer las compras, haz una lista precisa y con detalle de los alimentos que necesitas y que esto implique que has planificado tus comidas de la semana. Esto te permitirá comprar únicamente lo que sea útil y evitar las compras impulsivas de alimentos que podrían terminar desperdiciados.
- Almacena los alimentos de manera correcta: es importante que te asegures de almacenar los alimentos correctamente con la finalidad de prolongar su vida útil. El caso de las frutas es uno de los más oportunos de mencionar, no se debe olvidar debes refrigerar las frutas y los vegetales de tal forma de mantenerlas frescas más tiempo.
Además, es necesario prestar atención a las fechas de caducidad y utilizar primero aquellos alimentos que se encuentren cerca de vencerse.
- Aprovecha las sobras: evita tirar sobras de comida a la basura. En lugar de ello, resulta más beneficioso buscar formas creativas de utilizarlas. Un ejemplo es el de las sobras de pollo, las cuales se pueden usar para hacer una buena ensalada. También los vegetales que sobran se pueden guardar en el refrigerador para hacer una deliciosa sopa.
Si no tienes el tiempo necesario para consumir las sobras, mantenerlas congeladas para usarlas en otra ocasión.
- Compra únicamente lo que necesitas: en ocasiones, muchas personas compran más alimentos de los que realmente necesitan para terminar tirándolos al estropearse. Es importante comprar sólo lo que sea necesario y evitar las ofertas a menos que estén seguro de que podrás consumir los alimentos antes de que caduquen.