A veces se producen accidentes en las obras de construcción, a pesar de todas las medidas de seguridad y las precauciones que se toman. Estos percances suelen acarrear una gran cantidad de problemas médicos y financieros, por no hablar de cómo afectan a tu capacidad de trabajo. Es por este motivo que a través del siguiente post te hablaré sobre la importancia de contratar a un abogado de accidentes en obras.
Los abogados de accidentes laborales
Una lesión puede tener un impacto negativo importante en tu salud mental y financiera, independientemente de que haya sufrido lesiones graves en un accidente de obra o de que un ser querido haya fallecido como consecuencia de un accidente.
Averiguar quién causó el accidente y cómo obtener una compensación por los gastos médicos, la pérdida de ingresos y otras pérdidas podría ser lo último en lo que piensa. Los abogados de accidentes de construcción con experiencia pueden ayudarte con a identificar quién fue el culpable del accidente, recopilar toda la documentación necesaria, interactuar con las compañías de seguros y a obtener la indemnización que necesita para volver a sentirse mejor.
Aunque contratar a un abogado en todos los casos de accidente puede no ser necesario, hay circunstancias en las que es absolutamente esencial hacerlo. Por ello, lo ideal es realizar la consulta, de tal forma que puedas salir de dudas.
Capacidad para llevar casos complejos
Algunos incidentes que ocurren en obras de construcción son bastante sencillos de resolver, es obvio quién es el culpable y qué tipo de indemnización se requiere. Otros accidentes son excesivamente complejos y exigen una investigación exhaustiva, un conocimiento jurídico profundo y la capacidad de presentar cada caso de forma persuasiva.
Un abogado con experiencia en accidentes de construcción tendrá los conocimientos y la experiencia necesarios para investigar tu caso con el fin de determinar lo que sucedió, quién fue el responsable y cómo el accidente te ha afectado y afectará.
Colaborarán estrechamente con todos los profesionales de la salud para evaluar los efectos del accidente a corto y largo plazo y se asegurarán de que se recopilen todos los registros necesarios para demostrar la gravedad de tus lesiones.
Y lo que es más importante, un abogado conoce los entresijos de las demandas y los acuerdos, así como la legislación pertinente. Como resultado, puedes concentrarse en mejorar mientras ellos tratan de conseguir una recompensa justa. Pueden tratar directamente con los documentos legales, las compañías de seguros y otros abogados.
Conocimiento de otras fuentes de indemnización
En un accidente en una obra, la parte responsable no suele ser inmediatamente evidente. Aunque hay casos en los que la culpa es evidentemente del empresario, es frecuente que el accidente sea consecuencia de la negligencia de un tercero. El ingeniero, el fabricante del equipo de construcción, o el productor de los materiales cuya negligencia causó la tragedia podría ser el culpable.
Un abogado especializado en accidentes de la construcción sabe cuáles son las preguntas correctas que hay que hacer y la mejor manera de evaluar los hechos en torno a un accidente para identificar la verdadera causa.
Estos casos pueden ser más difíciles de probar, pero un abogado experto entiende cómo investigar situaciones difíciles para obtener una compensación de las partes adecuadas. Para determinar quién es el responsable, dedicarán tiempo a investigar la obra, los relatos de los testigos y otras partes implicadas.
Con frecuencia, la parte contraria es una empresa considerable con un departamento jurídico especializado. Para garantizar la protección de tus intereses, un abogado de obras de construcción puede competir mano a mano con un grupo de abogados corporativos.
¿Cuándo consultar a un abogado por un accidente en la construcción?
Cuando te encuentres con alguna de las siguientes lesiones, es aconsejable ponerse en contacto con un abogado de accidentes de la construcción lo antes posible. Puede que esto no sea lo primero que se te ocurra cuando sufra un accidente, por lo tanto, tómalo en cuenta:
- Tanto las descargas eléctricas como las quemaduras.
- Huesos rotos y fracturas.
- Daños en la columna vertebral o en el cuello, como la radiculopatía cervical.
- Encefalopatía traumática.
- Pérdida de visión o audición.
- Y, por supuesto, muerte injustificada.