Si eres propietario de un inmueble y estás pensando en venderlo o alquilarlo, debes saber que invertir en su reforma puede salir muy rentable. Sin embargo, hay que conocer bien qué cambios son los que pueden suponer una verdadera ganancia.
A la hora de establecer un precio de venta o un alquiler, hay muchos factores a tener en cuenta. Evidentemente, un piso en venta en Barcelona tiene más valor en el mercado que uno de similares características situado en una población mucho más pequeña.
La ubicación de la propiedad, su orientación, la superficie útil, las vistas, etc., son todas características clave que, lamentablemente, no podemos cambiar. Pese a ello, estos factores no son los únicos que influyen y, afortunadamente, es posible subir el precio de venta o alquiler del inmueble invirtiendo de forma inteligente en su reforma.
Elaborada gracias a la ayuda de la inmobiliaria de lujo en Barcelona, Monika Rüsch, esta pequeña guía pretende ofrecer orientación a todos aquellos propietarios interesados en revalorizar su propiedad.
Estudia el potencial de la vivienda
Desde esta inmobiliaria en Barcelona, nos recuerdan que, antes que nada, es necesario tasar la propiedad. El coste de este servicio puede variar en función del tamaño de la vivienda o de su ubicación, pero es siempre un dinero bien invertido.
Así mismo, también es conveniente estudiar muy bien cuál es el presupuesto con el que contamos. Puede que nos veamos obligados a hacer algunas reformas para cumplir con los requisitos legales antes de vender o alquilar. Estas deberán ser tenidas en cuenta a la hora de determinar cuánto dinero podemos invertir en aumentar el valor del inmueble.
¿Cómo aumentar el valor de una vivienda?
Para responder a esta pregunta, primero debemos hacernos otra: ¿Qué es lo que busca el inquilino o comprador al que deseamos atraer? Por supuesto, cada caso es diferente; pero, por suerte, contamos con suficientes datos como para saber lo que busca un gran porcentaje de ellos.
Buena distribución
Ya se trate de un piso en alquiler en Barcelona o de un chalet en una pequeña población, el cliente medio busca, sobre todo, una buena distribución. Las viviendas más demandadas suelen ser aquellas que cuentan con una media de dos o tres dormitorios. También se valoran más los espacios abiertos y con buena iluminación natural.
Cocina y baños en buenas condiciones
La cocina y los baños deben producir muy buena impresión a primera vista. Un aspecto descuidado o demasiado antiguo puede echar para atrás a muchos compradores o inquilinos potenciales.
Vivienda bien aislada térmicamente
Un buen aislamiento térmico hará que la casa sea más confortable y, por tanto, más atractiva a ojos de aquellos interesados en ella. A medio y largo plazo, reducir el gasto mensual en las facturas de luz y gas es algo que puede justificar una ligera subida del precio de venta o del alquiler.
Almacenamiento
Los armario empotrados y las despensas son un gran atractivo para muchos compradores. Son espacios de almacenamiento que ya vienen con la casa y que evitan tener que comprar muebles. No obstante es importante que se vean en buenas condiciones. Si no dispones de ellos, es buena idea añadirlos, especialmente en los dormitorios principales.
Buena estética
Algunos de los cambios más efectivos son los más baratos.
Arregla paredes y dales una buena mano de pintura. El blanco es el mejor color, además hace que las habitaciones se vean más espaciosas y con más luz.
Opta por muebles atemporales y evita la decoración excesiva. Unos pocos detalles coloridos o algún elemento vintage puede dar el toque perfecto a la habitación.
Como vemos, aumentar el valor de una vivienda es algo al alcance de todos los presupuestos. Un poco de interés y tiempo puede marcar por completo la diferencia.