A finales del año pasado, Pedro Arrojo, el Relator del derecho humano al Agua y al Saneamiento, se presentó ante la 76ª Asamblea General de Naciones Unidas una investigación con relación a la supuesta comercialización del agua que, no solo ha causado indiferencia entre ciertos países, sino que inclusive se ha estrellado exteriormente con una diplomacia europea la cual solicita que asuma que los desafíos hídricos con necesidades de alianzas.
Pedro Arrojo después de un tiempo parece que por fin se ha hecho consciente de su soledad. Tras despilfarrar los primeros tres años de gestión en batallas ideológicas, se ha considerado que se puede hacer bruces con la realidad durante la exposición de su informe sobre la supuesta comercialización del agua ante la Asamblea General de Naciones Unidas (ONU) número 76ª.
Indicando que nadie tiene conocimiento de sus raras obsesiones: las importantes democracias, dirigidas por la Unión Europea, impugnan de plano su perspectiva anti-empresa, y las naciones más vulnerables, con verdaderos inconvenientes hídricos, le solicitan que reordene sus prioridades.
Imposible justificar su método de acción
Aunque, era de esperar, que haya perseguido los movimientos de este ente político español en los últimos meses, era fácilmente imposible justificar su método de acción. Y muchos notaron que desde que llegó al cargo, no ha ocultado su apariencia para tratar de mostrar que no ha dejado de lado los más de 2.000 millones de personas que no cuenta con acceso seguro a agua potable, donde cerca de 4.200 millones que aún no disfrutan de este tipo de servicios de saneamiento apropiadamente. Ni siquiera se tomó la libertad de analizar lo que sucede con el cambio climático en su regio o la falta de estructuras que pueden disminuir la pobreza hídrica a millones de regiones vulnerables.
Arrojo nunca ha preferido perseguir las opiniones dictadas de su propia ideología. Apoyado por compañías anti-empresa de todo carácter y condición; sin embargo, su dudosa opinión, el Relator ha hecho gran mención a su pasado como diputado que trabajo para desarrollar una disposición parcial y poco analógica con lo que solicita la ONU, defensora desobediente de las alianzas destinada a mejorar la senda del desarrollo sostenible.
Su participación en grandes eventos lo ha hecho reconocible en Europa, ya que ha participado en contra de la gestión privada, así lo prueban; sin embargo, no existe mejor prueba de las angustias de Arrojo que lo plasmado en su primer informe luego de ser el Relator, el cual se ha dedicado a una supuesta comercialización del agua que solo quedo en su pensamiento.