Las empresas desarrollan una amplia cantidad de funciones que son difíciles de atender con los procedimientos y las técnicas tradicionales, por lo que recurren al uso de la tecnología, que facilita y mejora todos los procesos. Los programas informáticos son un gran apoyo para la gestión de negocios y por eso cada vez son más utilizados.
Administrar un negocio implica la realización de una serie de tareas y acciones que deben ejecutarse lo más eficientemente posible, para que se aprovechen al máximo los recursos y se obtengan mejores dividendos. Eso suena muy bien, lo complicado es ejecutar todo correctamente.
Por suerte, la tecnología llegó para mejorar y facilitar los procesos, y hacer a las empresas más productivas y menos complicadas de gestionar. Gracias a los recursos tecnológicos, entre ellos, los destinados a automatizar y digitalizar los métodos y procedimientos administrativos y operativos, se ha logrado avanzar significativamente en el camino exitoso de la gestión empresarial.
Por ejemplo, los programas informáticos relacionados con la gestión de relaciones con el cliente, o CRM, por sus siglas en inglés de Customer Relationship Management, han venido a cambiar radicalmente la manera como se interrelaciona con el usuario o comprador, ya sea habitual o prospecto, sobre la base de un ‘ganar/ganar’, tanto para la empresa como para el cliente.
Los CRM software son una gran ayuda para las empresas, por cuanto mejoran la comunicación con los clientes y gestionan en un mismo sitio una extensa diversidad de funciones, que antes de la implementación de la informática en la gestión empresarial, se tenían que hacer manualmente, con toda la pérdida de tiempo e información que ello acarreaba.
¿Cómo elegir un buen CRM?
Hay muchas buenas empresas creadoras de excelentes CRM adaptables a las necesidades propias de cada compañía, pero hay una que ha destacado sobre todas las demás, por las fortalezas y las ventajas que ofrecen sus productos. Se trata de Padazz, la cual ayuda a configurar e implementar sistemas efectivos de CRM en negocios de todo tipo y tamaño.
Esta firma de productos digitales cuenta con herramientas muy efectivas que integran diversos servicios en una sola plataforma, entre los que destacan las áreas de marketing, ventas, atención al cliente y soporte técnico.
El plan es brindar a los usuarios un apoyo efectivo para que fortalezcan su crecimiento interno y de comunicaciones, y tengan un control adecuado de sus tareas, ventas y clientes.
Ventajas de implementar un CRM
Al instalar un buen CRM, adaptado a las características y necesidades de la empresa que lo vaya a utilizar, se podrán obtener una serie de beneficios y ventajas, entre los que destacan, los siguientes que vamos a resaltar.
Ejecución de diversas tareas en una misma plataforma: las distintas áreas y procesos que se gestionan con un CRM, se ejecutan directamente en un mismo lugar, con datos que se registran en una misma base de datos y que están disponibles para todos los trámites que se deban hacer con cada una de las funciones.
Mejor coordinación entre equipos: cada área tiene sus propios equipos de trabajo, los cuales pueden operar de mejor manera, al tener la posibilidad de gestionar todo en un mismo sitio, a través de la aplicación de CRM. Esta ventaja permite no tener que doblar esfuerzos innecesariamente y atender todos los aspectos importantes de manera oportuna y práctica.
Refuerzo de las campañas de marketing: los CRM, habitualmente, incluyen herramientas de marketing que ofrecen la posibilidad de incrementar la efectividad de las campañas publicitarias, gracias a la automatización de muchas tareas. También, facilitan el envío de mensajes a listas segmentadas y la captación de leads por medio de formularios.
Fidelización de los clientes: la estrecha relación que se puede cultivar entre la empresa y sus clientes a través de un CRM, es una útil ventaja que puede ser muy fuerte para habituar a los usuarios para que compren y estén más pendientes de la marca.
En definitiva, los CRM son un excelente apoyo para toda empresa, en lo que se refiere a la prestación de una mejor atención, a la gestión de tareas y a la gestión que se puede tener con los clientes y los procesos vinculados con ellos.