En el sereno y pintoresco municipio de Navalilla, situado en la provincia de Segovia, emerge una bodega familiar que brilla como faro de la tradición vinícola: Bodegas Navaltallar. Fundada en 2003 por Romualdo Maldonado y su familia, esta bodega se ha embarcado en una misión audaz: rescatar la gloriosa historia vitivinícola de la región. A través de años de dedicación y arduo trabajo, Bodegas Navaltallar ha logrado revivir el legado y ha ganado una sólida reputación como productores de vinos de excelente calidad.
A continuación, nos sumergiremos en la historia de Bodegas Navaltallar y su valioso aporte a la viticultura en Navalilla y al enoturismo.
La semilla que dio origen a Bodegas Navaltallar fue plantada en el corazón de Romualdo Maldonado y su familia, quienes anhelaban rescatar la rica tradición vitivinícola en el municipio de Navalilla.
En efecto, si nos remontamos a las antiguas crónicas de Castilla, descubriremos cómo en el siglo XII el Rey Alfonso VII, fundador de la Comunidad de Villa y Tierra de Sepúlveda, recurría a esta tierra para obtener su preciado néctar. Inspirados por este legado ancestral, los Maldonado se embarcaron en una travesía para revitalizar la viticultura en la zona.
En el año 2005, Bodegas Navaltallar llevó a cabo su primera vendimia. Aunque la cosecha fue modesta en términos de cantidad, su calidad resultó excepcional. Dos años más tarde, en 2007, se presentó al mundo la primera botella bajo el prestigioso sello de Navaltallar, marcando así el hito inaugural en la trayectoria de la bodega en la industria del vino. En ese período, Bodegas Navaltallar logró recuperar ocho hectáreas de viñedos, una hazaña destacable considerando que en el pasado Navalilla albergaba más de 300 hectáreas de viñas.
En el año 2009, Bodegas Navaltallar culminó la puesta en pie de su nueva bodega, un espacio diseñado para garantizar un elevado rendimiento y producir hasta 300.000 litros de vino anuales. Paralelamente, la bodega se involucró de lleno en los trámites necesarios para ampliar la Denominación de Origen Protegida (D.O.P.) Valtiendas, con el objetivo de abarcar la margen izquierda del río Duratón y extender su influencia hasta el propio término municipal de Navalilla. Aunque la oficialización de esta ampliación se concretó en junio de 2011, Navaltallar ya participaba activamente en eventos y actividades de promoción de la prestigiosa marca Valtiendas desde los primeros compases de aquel mismo año.
El año 2011 se alzó como un hito trascendental en el devenir histórico de Bodegas Navaltallar, cuando su excepcional vino tinto Roble 16 2007 fue proclamado el soberano indiscutible de su categoría en Segovia, un logro magnífico consagrado por la aclamada Guía de Vinos del mundo de Castilla y León.
Además, la prestigiosa Guía Repsol concedió a esta joya vinícola una merecida distinción: 91 puntos, una calificación reservada exclusivamente para los grandes elixires. Estos galardones desataron un torbellino de reconocimiento y entusiasmo en torno a la marca, resultando en un crecimiento exponencial de las ventas. En comparación con el año 2008, las cifras se multiplicaron por ocho gracias a la expansión estratégica de su distribución profesionalizada en enclaves tan distinguidos como Segovia, Galicia e Islas Canarias.
A partir del año 2012, Bodegas Navaltallar ha trascendido fronteras, erigiéndose como embajadora del buen gusto en el escenario internacional. Su excelencia ha sido aclamada en destinos tan exquisitos como Suecia, Suiza y Alemania, donde sus vinos han sido acogidos con deleite y admiración.
La bodega ha tejido una sólida red de distribución que se extiende hacia otros horizontes, como los exóticos mercados de China, Filipinas y Nepal, atrayendo la atención de importadores y generando nuevas y emocionantes oportunidades comerciales. A nivel local, la magnificencia de Bodegas Navaltallar ha sido reconocida con distinguidas menciones de calidad, como Alimentos de Segovia y Tierra de Sabor, expandiendo su presencia en regiones tan diversas como la encantadora Cataluña, la majestuosa Madrid y la soleada Costa del Sol.
El resonante éxito de Bodegas Navaltallar encuentra sus raíces en la prodigiosa experiencia y el exquisito talento del enólogo Juan Jesús Ayuso, cuya maestría ha desempeñado un papel fundamental en la consolidación y prestigio de la marca en el selecto mercado nacional.
Con una devoción inquebrantable hacia la excelencia, Navaltallar ha alcanzado niveles superlativos de calidad, trascendiendo los límites de lo convencional y creando una identidad única y distintiva. Este logro excepcional ha engendrado un legado de reconocimiento y lealtad entre los verdaderos amantes del vino, aquellos que valoran la sofisticación y la autenticidad en cada sublime sorbo.
A partir del año 2013, Bodegas Navaltallar ha perseverado incansablemente en su búsqueda de nuevas oportunidades de desarrollo, explorando horizontes insospechados. Más allá de producir vinos bajo su prestigiosa marca Navaltallar, la bodega ha incursionado en la noble tarea de elaborar vinos para otras reconocidas bodegas, desplegando su innato talento y expertise, en aras de enaltecer la excelencia enológica.
Entre las joyas que engalanan su corona se encuentra la inigualable «Quinto Elemento», una línea exclusiva concebida con mimo y sofisticación, cautivando los sentidos de los paladares más exigentes y siendo comercializada en el círculo selecto de uno de los establecimientos más prestigiosos de España: El Corte Inglés.
No contentos con ello, Bodegas Navaltallar ha dado vida a las destacadas marcas Valmenia y Vivencias, gestadas en íntima colaboración con viticultores locales, tejiendo así una red de complicidades y enriqueciendo el floreciente ecosistema vitivinícola de la región con su sello distintivo de distinción y buen gusto.