No se puede negar que la salud dental es importante en todas las etapas de la vida. Pero de lo que la mayoría de la gente no se da cuenta es que el cuidado bucal debe comenzar desde una edad temprana. En los seis primeros meses de vida de un niño, los dientes empiezan a desarrollarse, por lo que acudir a un odontopediatra puede hacer que sea posible realizar las correcciones necesarias antes de que se complique la situación.
Las necesidades dentales de los niños son muy distintas de las de los adultos. Un odontopediatra no sólo tiene la cualificación y formación adecuadas para tratar a niños, sino que además cuenta con años adicionales de formación que le permiten satisfacer las necesidades específicas de esos niños, como es el caso de la clínica dental en Castellón Gozalbo Dental.
Ayudar a los niños a tratar sus problemas de higiene bucal no sólo es una decisión inteligente que tendrá repercusiones en su salud, sino que también puede ahorrar dinero a los padres a la larga.
Continúa leyendo para descubrir por qué deberías llevar a los más pequeños al odontopediatra desde una edad muy temprana.
Beneficios de la odontopediatría
A continuación te presentamos algunas de las razones más relevantes por las que es necesario llevar a tu hijo al dentista antes de que cumpla un año.
1. Todo está adaptado a los niños
Llevar a tu hijo a una consulta dental pediátrica es mucho menos intimidatorio. Por ejemplo, la consulta de odontopediatría en Castellón Gozalbo Dental está diseñada para que sea cómoda tanto para los adultos como para los niños. Un entorno agradable anima a tus hijos a asociar sentimientos positivos con el dentista.
El equipo dental también puede asustar a un niño cuando lo ve por primera vez. En ocasiones, los consultorios odontopediátricos utilizan versiones más pequeñas del mismo equipo, lo que hace que tu hijo se sienta mucho más cómodo.
Un dentista infantil también se toma el tiempo de mostrar y explicar para qué se utiliza el equipo, lo que permite que tu hijo se sienta más a gusto.
2. Formación adecuada
Todos los dentistas reciben una formación similar y pueden ofrecer tratamiento a personas de todas las edades. Pero los dentistas pediátricos reciben formación adicional para conocer el desarrollo y tratamiento de los dientes de los niños.
Los niños suelen tener problemas complejos de crecimiento y desarrollo de los dientes que un odontopediatra puede identificar mejor.
Los dentistas infantiles están más familiarizados con los problemas dentales típicos de los niños y con la mejora de la salud dental. También tienen experiencia con niños de todas las edades y pueden trabajar cuidadosamente con tu hijo para que no desarrolle miedo al dentista.
3. Cuidados preventivos
Los odontopediatras se especializan en procurar una atención preventiva correcta pero divertida y educativa para tus hijos.
Los cuidados preventivos se realizan de una forma divertida y agradable que permite a tus hijos aprender hábitos dentales saludables a una edad temprana. Cepillarse los dientes, usar hilo dental y saber que hay que cepillarse los dientes después de comer dulces sirven de base para unos dientes adultos sanos.
Aun así, a los niños les encantan las golosinas y los dulces, por lo que es muy fácil que se olviden de cepillarse cuando deben. El cuidado preventivo detectará bacterias y gérmenes antes de que se produzcan infecciones.
4. Ayudan con los malos hábitos
La odontología infantil no sólo ayuda con la atención preventiva; también ayuda con esas costumbres comunes como chuparse el dedo o morderse las uñas.
Muchos niños tienen estos hábitos, pero mantenerlos durante demasiado tiempo puede causar problemas en el desarrollo de los dientes y la necesidad de futuros tratamientos de ortodoncia.
Los odontopediatras tienen experiencia en tratar positivamente este tipo de hábitos bucales para llegar a la raíz del problema y eliminarlo sin causarle un trauma al pequeño.
5. Comprueba si hay problemas de habla y mordida
Los dentistas especializados en niños evaluarán la mordida de tu hijo y cómo puede formar las palabras. Hay que prestar atención a ello, porque los más pequeños pueden desarrollar problemas de nutrición si no pueden masticar y morder correctamente.
Los problemas del habla también suelen estar relacionados con la salud dental. Cuando los dientes están mal alineados, los niños pueden aprender sonidos y pronunciaciones erróneos porque no pueden emitir los correctos.
La intervención precoz es vital. Cuanto antes detectes los problemas del habla, más evitarás que se conviertan en un problema de por vida para tu hijo.
6. Evaluar la ortodoncia
Las visitas periódicas a un dentista pediátrico permiten evaluar continuamente la boca de tu hijo durante las épocas de mayor crecimiento y desarrollo.
En la consulta del odontopediatra se podrá realizar exámenes minuciosos de los dientes en desarrollo de tu hijo para comprobar si hay impactos dentales, desalineación u otros problemas estructurales.
La tecnología permite a los dentistas trazar exactamente cómo debe ser la mordida de tu hijo. Muchas veces se pueden recomendar tratamientos preventivos, como ejercicios de mandíbula, que pueden evitar por completo la necesidad de ortodoncia.
Es normal que los padres se pregunten cuándo deben llevar a su hijo al dentista por primera vez. La respuesta a esta pregunta es sencilla. Un niño debería comenzar a visitar a un odontólogo cuando le sale el primer diente y, la mejor opción es hacerlo en la consulta de un odontopediatra, como los que puedes encontrar en Castellón en Gozalbo Dental.