La miel es un alimento que el hombre conoce desde hace miles de años. Se trata de una sustancia producida exclusivamente por las abejas y que tiene propiedades nutritivas y curativas muy importantes.
La miel de abejas es un producto que no se daña a la intemperie, se han encontrado recipientes con miel intacta que datan de varios siglos, esto se debe a su alto contenido de azúcares y su baja humedad.
La extracción y procesamiento de la miel de abejas es lo que permite que se pueda consumir masivamente y que se encuentre en supermercados y tiendas de todo el mundo.
La apicultura
La apicultura es la actividad que consiste en criar abejas, cuidarlas y proporcionar las condiciones ideales para que produzcan miel pura para consumo humano.
El producto principal de la apicultura es la miel, pero no es el único, también se obtiene jalea real, cera, propóleo, entre otros.
El apicultor es el profesional que se dedica a la extracción y recolección de la miel de abejas, entre otras labores. Para esto debe realizar control de la población y monitoreo del estado de la producción.
La apicultura es muy importante para la economía mundial, ya que involucra negocios prósperos, que generan recursos, empleos y actividades conexas.
¿Cómo se realiza la extracción de la miel pura de abejas?
La extracción de la miel es un proceso que el apicultor realiza con mucho cuidado. Este proceso consta de 3 etapas principales, las cuales describiremos a continuación:
- Recolección de las alzas. En esta etapa se recoge el exceso de miel de las alzas, es decir, la miel que se puede retirar fácilmente.
- Apertura de las celdas. Las abejas sellan las celdas de la colmena con una cera especial que ellas mismas producen. Para poder sacar la miel, el apicultor debe retirar ese sello. Esto debe hacerse con sumo cuidado para no dañar la colmena.
- Centrifugación. Una vez que las celdas están abiertas, el apicultor las introduce en una máquina centrifugadora. Como consecuencia del movimiento de esta máquina, la miel sale de las celdas y es posible recolectarla.
¿Cómo se extrae el polen?
Como sabemos, en el proceso de extracción del néctar de las flores, las abejas se impregnan de polen. Ellas esparcen parte de ese polen contribuyendo con la reproducción de muchas especies de plantas.
Aun cuando pierden gran parte de ese polen en su recorrido, cuando llegan a la colmena todavía tienen mucho adherido a su cuerpo. Para poder retirar ese polen, el apicultor instala trampas en la entrada de la colmena, de manera que la abeja deba atravesarlas y dejar parte del polen en ellas. Este polen se recolecta en unas bandejas que luego se envasan apropiadamente.
¿Cómo se extrae la jalea real?
La jalea real es depositada por las abejas obreras en celdas diferentes, por lo tanto, el apicultor solo debe retirar la cera de esas celdas y extraer la jalea real con una espátula.
Por supuesto, no se debe retirar toda la jalea real, solo un porcentaje que se calcula de manera que las abejas siempre tengan suficiente.
¿Cómo es el procesamiento de la miel de abejas?
Una vez que termina el centrifugado, la miel queda depositada en un recipiente. De allí hay que pasarla a un primer filtrado que le elimina impurezas tales como, restos de polen o cera.
De ese filtrado, la miel pasa al proceso de maduración. Este proceso consiste en dejar la miel reposar en condiciones adecuadas, por un tiempo determinado. Luego de esto, la miel pasa a un segundo filtrado. Este segundo filtrado la dejará completamente lista para el envasado.
El envasado es el proceso de llenado de los envases individuales que llegarán al consumidor final.
La miel es un producto natural y altamente nutritivo, además tiene propiedades muy positivas para la salud y el bienestar. Por eso y muchas otras razones, la industria de la miel es muy importante a nivel mundial.